Una vez que el nuevo colaborador está
trabajando bien en la empresa, viene la parte que se puede llamar de
fidelización: consiste en lograr que esta persona cumpla los objetivos para los
que fue incorporado y a la misma vez, sienta que trabajar en su nueva empresa
está alineado con sus propios objetivos personales.
Tan importante como cobrar puntualmente la
remuneración, recibir información adecuada sobre cuestiones técnicas de la
liquidación de su sueldo, sobre los aspectos impositivos o cobertura de salud, son
los beneficios adicionales, que genera la percepción que la empresa cuida de su
equipo, prospera en sus negocios e invierte en mantener actualizados los
conocimientos de sus equipos a través de un programa de capacitación y de
promover un clima agradable de trabajo.
A medida que el talento se hace más escaso
en el mundo, las cuestiones extrasalariales toman cada vez más importancia. Los
motivos tienen que ver con la sofisticación que experimenta el mundo de los
negocios, que avanza a una velocidad mayor que las instituciones educativas y
el crecimientos demográfico.
A su vez, la globalización del mercado del trabajo agrega presión, ya que, a través del teletrabajo, profesionales y personal administrativo pueden elegir trabajar para una empresa que quede a diez cuadras de su casa o a diez mil kilómetros. Hoy existen distorsiones que llevará mucho tiempo equilibrar. Las diferencias de poder adquisitivo de las diferentes monedas y la facilidad que ofrecen las telecomunicaciones han quedado en evidencia durante la pandemia.